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Hace apenas unos meses, Khaled Zaghdoud no creía que poder completar su último proyecto artístico.

Empezó a trabajar en él después de los mortíferos atentados terroristas que sacudieron Túnez hace casi seis años, pero desde que una ola de violencia afectó a su ciudad natal, Ben Gardan, donde el Estado Islámico ha tratado de establecer un bastión en 2016, se convirtió en objetivo de los extremistas.

A lo largo de toda Europa, los profesores se enfrentan a aulas cada vez más diversas.

Aunque la diversidad ha sido durante mucho tiempo una característica propia en el continente, la creciente mezcla de influencias religiosas, culturales y lingüísticas -provocada por la migración internacional e intraeuropea- ha creado muchas oportunidades y muchos desafíos en el panorama educativo europeo.

"El día del ataque fue un caos", comenta John Dada. "Los atacantes empezaron a disparar al entrar en la comunidad, haciendo que los que se quedaron atrás corrieran a toda prisa para ponerse a salvo".

Dada es un enfermero jubilado y beneficiario de una beca del KAICIID que estaba cuidando a los ancianos como parte de su proyecto en Kafanchan, al sur del estado de Kaduna, cuando su comunidad fue atacada por una banda de bandidos y cuatreros el pasado 12 de agosto de 2020.

Los discursos de odio se intensifican tras el COVID-19

A pesar de que el año pasado las Naciones Unidas pidieron un alto el fuego mundial para que los países pudieran concentrar sus esfuerzos en la pandemia de coronavirus, el discurso de odio y los conflictos han aumentado en muchas regiones del mundo.

Hijo de inmigrantes chinos en Indonesia, Kris Tan creció bajo la religión confuciana. Se dedicó a una educación permanente en el confucianismo, desde la escuela primaria hasta la universidad, y ahora preside la Junta Central del Confucianismo Juvenil en Indonesia y representa a los confucianos indonesios en eventos interreligiosos en todo el mundo.

A finales de 2019, Egipto experimentaba un sólido crecimiento económico. La inversión extranjera directa había regresado, la construcción estaba en auge y el turismo iba en aumento. Sin embargo, en pocos meses, los viajes internacionales y la recuperación económica se paralizaron en medio de una pandemia mundial.

Cuando el COVID-19 comenzó a impactar al mundo en marzo con el aumento de las cifras de muertos, la pérdida de empleos y el cierre de fronteras, Sohini Jana y Jon Rasmussen se dieron cuenta de que había jóvenes de todas las religiones que necesitarían apoyo mental y emocional.